EL EVANGELIO DE LA INCIRCUNCISION
Gálatas 2.
La Circuncisión representa la ley, y el evangelio de la circuncisión es aquel que se presenta a los judíos cumplidores de la ley.
La incircuncisión representa la ausencia de ley, así que el evangelio de la incircuncisión es aquel que se presenta a los gentiles, los cuales son todos los pueblos que NO estaban sometidos a la ley judía, entre ellos nosotros.
La circuncisión representa la ley, la ley es de obligatorio cumplimiento y el no cumplirla es pecado, y el pecado trae consigo castigo, y el castigo del pecado es muerte.
Pero los de la incircuncisión antes de serles presentado el evangelio, tampoco estaban exentos de pecado, mucho menos de muerte; aunque, a ellos no les había sido dada la ley; sin embargo, también estaban condenados a muerte, porque el pecado a pesar de no ser manifestado o revelado como pecado (lo que se hace por medio de la ley), no deja de ser pecado.
Así que por medio de la ley, se abrían los ojos para darnos cuenta de lo que era pecado, con el fin de que lo evitáramos y no ser esclavos del pecado, sino ser agradables a Dios.
Pero la ley en vez de ser usada para libertad por medio del conocimiento, más bien fue usada para esclavitud por medio de la obligación de hacer ritos y prácticas, los cuales cuando son por obligación y no de corazón, para nada aprovechan, sin embargo si esclavizan, pues todo aquello que se hace por obligación, al final lo sentimos como esclavitud.
De allí que Pablo llama a la circuncisión esclavitud y a la incircuncisión libertad...pues en la libertad está lo genuino, en la libertad está la salvación genuina. En todo aquello que procedemos a hacer de corazón (por amor) hay verdadera voluntad, aceptación y disposición.
Así que nada nos pesa cuando amamos de corazón el hacer algo, dice el Señor que "ligera es su carga y su yugo es fácil" (Mt 11:30), esto es porque está destinado a aquellos que lo aceptemos y queramos hacer por voluntad y de corazón.
Si creyendo estar en Cristo, aún sentimos que el practicar el evangelio nos es una carga, es que quizás aún lo estemos viendo como una ley moderna, la cual haya que cumplir por lo que dice la letra y por la obligación de lo encomendado, sin embargo, se puede hacer mucho más que lo encomendado cuando se hace libremente y por amor.
Así que por la ley los mismos se hicieron esclavos, pero por Cristo somos hechos libres, porque ahora lo que hacemos, lo hacemos de corazón, lo que se hace de corazón es genuino, lo que es genuino es de verdad, y la Verdad nos hace libres.
Si en el evangelio hago hasta donde me toca por cumplir, es porque aún soy esclavo.
Si en el evangelio hago más de lo que me toca por amor y convicción, es porque de verdad soy libre.
"Con Cristo estoy juntamente crucificado, Y YA NO VIVO YO, MAS VIVE CRISTO EN MI; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, EL CUAL ME AMO Y SE ENTREGÓ A SI MISMO POR MÍ" Gálatas 2:20
Dios nos bendiga.