Estudio panorámico del contexto

A. Fondo histórico:

Los salmos de confesión, de petición, de súplica o de lamento forman el grupo más grande en el salterio. En esta unidad estudiaremos tres de ellos. La fe de los salmistas encontró su más fuerte apoyo en el hecho de que el Dios Santo entró en la historia para ayudar a los que sufrían, a los oprimidos. El lamento no se limita a los salmos: lo encontramos en los profetas, en Job. aun en las palabras de Jesús, pero su principal expresión se ve en los salmos. Casi setenta de los ciento cincuenta salmos son de este estilo.

Los salmos de lamento se dividen en dos grupos:

1. Lamentos de la comunidad.

2. Lamemos individuales.

Lo que caracteriza a estos salmos es su convicción de que la intervención de Dios puede hacer la diferencia en su situación. No son "lamentaciones" donde se queja por una situación irreversible, el lamento es una súplica a Dios para que cambie una situación desesperante. Vistos así, podemos ver que son, en verdad, cánticos de esperanza y alabanza.

Como en los demás salmos, el salmo de lamento sigue un formato preciso:

1. Se dirige a Dios

2. presenta su queja

3. expresa su confianza en Dios

4. presenta su petición

5. ofrece palabras de seguridad

6. compromiso o voto de gratitud.

Como se puede ver en este formato el salmista seguía una línea lógica y progresiva para presentar su queja y súplica a Dios.

Es interesante que aun cuando en la Biblia casi la mitad de los salmos son de lamento, en las iglesias cantamos más bien los salmos e himnos de alegría, gozo. Probablemente es porque se ha temido que estos no expresan bastante e. o que es malo quejarse delante de Dios. Hay que enfatizar que estos salmos son expresiones honestas de la fe del salmista. El salmista cree que no hay nada prohibido o fuera del interés de Dios. ¡El creyente debe expresar a Dios en palabras sus pensamientos y sus emociones!

El mismo formato del salmo de lamento nos ayuda a ver el movimiento del salmista hacia Dios, y la progresión hacia la resolución de su queja. Va de la expresión del lamento a un cántico de alabanza, y a un voto de gratitud. El uso He estos salmos era tan importante en el culto que parece que el sacerdote o algún oficial del culto respondía a la súplica de la persona en el momento oportuno para asegurarle que Dios había oído (recibido) su queja o problema, que era perdonado, y que él le ayudaría. Así, la persona podía irse en paz, podía sonreír, podía renovar su esperanza. Su mundo había sido transformado por su encuentro con Dios.

B. Enfasis:

El contexto de los salmos escogidos para este estudio son todos considerados salmos de lamento del individuo. Hay 7 salmos (6. 32, 38. 51, 102, 120, 143) que durante siglos han sido considerados "los penitenciales, especialmente en la liturgia de confesión. Así han traído bendición y nueva esperanza a muchos. Cada uno de éstos habla de la devastación interna, profunda; no hay otra posibilidad excepto el arrepentimiento y la búsqueda del perdón y la restauración del Señor.

• El Salmo 6. es una oración en tiempo de prueba. "ten misericordia de mi porque desfallezco” v. 2. “¡Jehovah ha escuchado mi ruego!

• El Salmo 102 expresa el lamento de un enfermo, los síntomas físicos de su dolor y de su necesidad. El versículo 24 pide "Dios mío. no me lleves en la mitad de mis días.” La última estrofa refleja el mensaje de Isaías 51:6-8 y se citan en Hebreos 1:10- 12.

• El Salmo 143 es un lamento individual que expresa la desesperación del Salmista a causa de sus enemigos. Este Salmo tiene algo más. Los vv. 1.2. 11. 12 forman el “marco” para el lamento y proclama que la única manera en que el Salmista puede acercarse a Dios es por medio de su justicia y su fidelidad.

El termina afirmando: “yo soy tu siervo. Estos salmos de lamento van por un camino rocoso y difícil, pero logran la felicidad de haber sido oídos y de haber recibido contestación.